Escrito por Miriam Mazover
El martes 2/5 tuvo lugar la conferencia titulada “La angustia y el goce del Otro” a cargo del prestigioso psicoanalista Héctor Yankelevich.
El expositor advirtió desde el principio que el concepto Goce el Otro conlleva una dificultad intrínseca en la clínica. No es algo que se pueda relatar con palabras, por el contrario forma parte vertebral de la estructura psíquica, única y singular de cada paciente, en tanto tiene que ver con su historia.
El goce del Otro alude a los tiempos primeros y primarios en donde el bebé, en el mejor de los casos, llega a este mundo sostenido en el deseo materno.
“El Deseo del Otro nos trae a la vida y nos sostiene en la vida, sólo que este Otro, además de desear, también goza” afirma Yankelevich.
El disertante nos aclara, que cada neurótico se las tendrá que ver en su vida y en su análisis, con las vicisitudes y las modalidades de este Deseo y de este Goce del Otro: para algunos sujetos resultó abrumador y en otros casos insuficiente.
La angustia es señal al tiempo que resulta una protección para el sujeto frente al Deseo y el Goce del Otro.
La pregunta a recorrer en cada análisis será “hasta dónde podrá llegar el sujeto”, si paradojalmente la angustia lo protege del Goce del Otro.
Otra temática que recorrió Yankelevich atañe a la importancia clínica del super yo, como encarnadura del Goce del Otro, en la estructura neurótica.
“El superyó es una amenaza al ser del sujeto”, afirma Yankelevich. Lo detiene en su deseo, en muchas ocasiones a la manera de neurosis de destino. Cuando el sujeto se destina a fracasar en la vida.
Para ejemplificar esta dupla Goce del Otro – Super Yo, Yankelevich se detuvo en la narración de un fragmento de un análisis de Histeria masculina, que como analista tuvo la oportunidad de dirigir.
Felicitaciones por la exposición
