El martes 20/9 tuvo lugar la Conferencia titulada “Las depresiones. Diagnóstico diferencial”, a cargo del reconocido psicoanalista Raúl Yafar.
Con gran claridad expositiva Yafar dejó planteado lo que denominara “la posición subjetiva del depresivo”.
Con la apoyatura del texto “Lo perecedero” de Sigmund Freud, el disertante afirmó que el sujeto depresivo presenta una problemática a nivel de la dinámica entre el yo real y yo ideal, o sea a nivel narcisístico.
No hay interjuego entre ambos yo , ya que para el sujeto depresivo la realidad no es aliada en su vida, sino por el contrario, es la que arruina y destruye los objetos idealizados.
Nada de la vida merece ser vivido, porque en algún momento, según el pensamiento del sujeto depresivo, se desgastará o se acabará.
“El depresivo retrocede ante la castración, no acepta la pérdida ni los duelos que ella trae aparejados, por este motivo se retira del juego de la vida, no pone a jugar su deseo, deja de lado cualquier apuesta y no puede, entonces, dar cauce al goce pulsional”, dice Yafar.
Retirado de la vida real, queda anclado en el gélido ideal, refractario al orden del deseo. Desde esa posición, el sujeto depresivo argumenta su desprecio por todo aquello que pueda causar placer, regocijo.
El expositor señaló en el último tramo de la disertación, que por la posición subjetiva recién mencionada, resulta muy difícil que el sujeto depresivo entre en análisis.
Desde la dirección de la cura, el analista no debería, según Yafar, refutarle los argumentos al sujeto, menos que menos intentar alentarlo para que disfrute algo de la vida. En cambio, el analista intentará mostrarle cómo funcionan sus ideales, también el extremo nivel de tiranía que ejerce sobre los objetos y los semejantes, a causa de que no acepta (aunque la conozca) a la castración y a sus consecuencias.
Excelente exposición en un clima de fructífero intercambio y debate. ¡¡Felicitaciones!!