¿A qué se denomina resistencia? Su valor en la cura.
En un tratamiento psicoanalítico denominamos “resistencia”, tal como S. Freud nos enseña, a las acciones o decires que perturban y en ocasiones se oponen a la prosecución de la cura: ➝ La resistencia como obstáculo.
Sin embargo, las resistencias se convierten en orientadoras fundamentales de la dirección de la cura: ➝ La resistencia como motor.
Los tipos de resistencia que S. Freud distingue:
A) Las resistencias provenientes del Yo (la represión, la resistencia de transferencia, la ganancia secundaria de la enfermedad).
B) Las resistencias del Ello (la compulsión a la repetición de lo mismo).
C) Las resistencias del Superyó (la necesidad de castigo y la reacción terapéutica negativa).
¡¡Importante!!
El paciente desconoce la producción de las resistencias, generalmente descree de las mismas a través de racionalizaciones.
¿Cuándo y cómo se manifiestan las resistencias?
¿Cuándo? S. Freud afirma: “Siempre que uno se aproxime a un complejo patógeno, la propia transferencia aparece como el arma principal de la resistencia”.
¿Cómo? Se detiene la asociación libre y se la reemplaza por la actuación en transferencia:
· Olvidos de concurrir a sesión y llegadas tarde.
· Enojos hacia el analista.
· Enunciaciones de demandas sin medida.
· Disconformidad y/o agravamiento de los síntomas.
¿Qué se reconstruye en el marco ficcional de la transferencia -suelo de la resistencia-?
El paciente reconstruye en el terreno transferencial su Complejo de Edipo, es decir, su posición frente a los Otros Primordiales. Fundamentalmente, repite las fijezas pulsionales -entregarse como objeto para fantasear un Otro sin falta-.
Intervenciones del analista frente a las resistencias del paciente:
El analista, desde su función, hará una lectura de aquello que está cifrado -a la manera de una clave- en las resistencias. A través de la interpretación, de las construcciones, de actos analíticos.
¡¡Clave Clínica!!: Aquello que insiste como obstáculo nos señala qué hay detrás del padecimiento psíquico.
¿De qué manera transmite el analista su lectura de la resistencia?
En tanto el analista está advertido de que las resistencias que el paciente manifiesta en transferencia son los puntos de fijeza pulsional en los que se encuentra atrapado a través de un goce masoquista -placer en el sufrimiento-, le transmitirá sus lecturas de manera muy delicada, sin ofender al Yo.
¿Qué finalidad tienen las lecturas de las resistencias en transferencia?
La lectura que hace el analista de las resistencias del paciente tiene, principalmente, como propósito que el sujeto pueda escucharse y reconocerse en su posición subjetiva para, de esta manera, ir restándose del lugar de objeto para el Otro y consiga, en consecuencia, emerger como sujeto de su propio deseo.
Resistencias del analista:
J. Lacan nos enseña que hay otro tipo de resistencia, que agrega a las que S. Freud conceptualizara: “la resistencia del analista”. Se refiere con “resistencia del analista” a los sentimientos contratransferenciales que le puede generar un paciente a su analista.
Por este motivo, resulta fundamental, indispensable e insustituible el propio análisis y las supervisiones clínicas, para que el terapeuta no actúe su propia fantasmática con el paciente.